CAMBIO/ Páez quiere lavarle la cara al Fútbol Nacional

Páez propone un cambio estructural
completo en la FVF

El reconocido estratega y dirigente del balompié nacional e internacional,  estuvo en Valera y pidió el respaldo de clubes, ligas y equipos en función de devolverle la luz a nuestro fútbol y sacarlo del letargo en el cual se encuentra.

El mensaje está muy claro….más allá de los razonamientos y el análisis sobre la grave situación del fútbol venezolano, especialmente lo relativo a la crisis de la Selección Vinotinto, el escándalo en la Federación Venezolana de Fútbol y la cuestionada “memoria y cuenta presentada por Laureano González, el ex seleccionador Vinotinto Richard Páez Monzón conversó largamente con los representantes de los distintos medios de comunicación regionales, acompañado por parte de su equipo en el denominado proyecto “Somos Vinotinto”, el cual tiene como finalidad rescatar la dignidad y devolverle el brillo del éxito al fútbol nacional en todas sus instancias.

Páez estuvo en el presidium junto al Coordinador Regional de “Somos Vinotinto” Edgar Salas, otro destacadísimo hombre de fútbol el tachirense César Semidey, los ex  jugadores Ruberth Morán, Elvis Martínez  y Rolando “Kojac” Álvarez, faltando Franco Ricci y Bernardo Añor, quienes se hallaban realizando otros contactos relativos a esta gira nacional promocional.

Las Asociaciones serían la piedra de tranca para su proyecto

Richard Páez profundizó durante el conversatorio informativo, sobre la necesaria y urgente transición y cambio de la estructura dirigencial que actualmente preside la FVF, pues como afirma el estratega , la Federación actual y desde hace muchos años está de espaldas al fútbol, a su masificación, a la proyección y desarrollo que engloban sus bases como estructura deportiva.

“Esto digo públicamente;  hoy está temblando la F.V.F. por el cambio que se viene, el cual será evidente desde la conformación de las planchas que serán elegidas en el próximo proceso de elecciones de las Asociaciones Regionales de Fútbol, pues serán ellas las que elijan el nuevo Presidente, y para eso necesitamos asociaciones comprometidas no manipulables y peseteras”.

A eso vengo, a traer el mensaje y llevarme las inquietudes de equipos, ligas y de las propias asociaciones, para que despierten tal como yo he mismo lo he hecho, porque he sido cómplice de muchas situaciones, las cuales no puedo callar más, primero por dignidad y respeto a mi amor por el fútbol y por Venezuela”-dijo tajante.

El merideño quiere reactivar e Sueño Vinotinto

Para Richard, allí está la clave para replantear y oxigenar el alma del balompié nacional, opacado por el clientelismo político y la evidente corrupción que hoy es evidente dentro del seno federativo. Es la metáfora entre David y Goliath, donde se juega nada y más y nada menos que el futuro y el alma que engloba la esencia, historia y futuro del fútbol nacional en todos sus sentidos.

Incluso Richard Páez reconoció como lo dijo, que dentro de ese oscurantismo que ha envuelto nuestro fútbol, él mismo ha sido un cómplice voluntario; pero no voluntario por aspirar a obtener beneficios, sino por su equivocada mentalidad en cuanto a no ser “piedra de tranca” de la federación en sus procesos; pero “ eso ya no puede ser y hay que salir a decir la verdad, con necesario propósito de enmienda”.

No podemos permitir más actos contrarios al sentir real del fútbol y los futbolistas; porque qué le queda a un futbolista, luego de entregar su vida útil al deporte que ama…sencillamente ¡Nada!. Por allí vemos a muchos ex jugadores caminando totalmente abandona dos, ya que no hay una estructura dirigencial que les proteja socialmente”.

Recordó que las crisis dentro de equipos y organizaciones son muy normales, sin embargo debe haber el temple, la energía, el fuelle y la vocación para salir de ellas y enrumbar el camino del cual nos hemos apartado. No se trata solo de recordar que a Venezuela se le tildaba de “Cenicienta” a nivel suramericano y mundial, y desde el 2001, el equipo Vinotinto se convirtió de una referencia deportiva en un sentimiento y una pasión nacional.

La Vinotinto pasó de ser un seleccionado a un propósito real y le dio a nuestra patria respeto bien merecido y ganado, porque le ganamos a equipos que jamás imaginamos, incluso antes de este resonante triunfo internacional apenas habíamos ganado tres partidos a nivel de selecciones en 35 años”. (Gabriel Montenegro)