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sábado, 25 de enero de 2014

FERVOR. Virgen de la Paz homenajeada por sus devotos

Culminada la Eucaristía, la Alcaldesa de Trujillo le colocó al llave de la ciudad a la adorada Virgen de La Paz para que se ala dueña de la ciudad y del estado, para que nos proteja de sucesos negativos y nos traiga abundancia, paz y todo lo mejor para el pueblo.



Una vez más la excelsa Virgen de La Paz fue venerada ayer por su hijos trujillanos y por los de otras latitudes, quienes año tras año acuden a esta tierra de paz y encanto a expresarle su amor y veneración. La fiesta religiosa se inició con una procesión que se está convirtiendo en tradición, desde el estadio Humberto González Albano hasta la Catedral de Trujillo, caminata que estuvo encabezado por la Alcaldesa y algunos directores del tren ejecutivo regional y de organismos nacionales y de seguridad.

La Virgen entró a la Catedral de Trujillo donde era esperada por una multitud que le rindió vítores, acompañada por el clero trujillano y de los obispos invitados como el presidente del Episcopado Venezolano, monseñor Diego Padrón; monseñor José de Jesús Núñez Valera, obispo de Ciudad Guayana (natural de Trujillo); monseñor Trino Valera, obispo de Guanare (trujillano) y por nuestra entidad estaban monseñor Cástor Oswaldo Azuaje, obispo de Trujillo; el obispo emérito Vicente Ramón Hernández Peña; monseñor Antonio Ramón Morelo; sacerdotes, religiosas, pueblo y medios de comunicación.

También estuvieron presentes el gobernador del estado, Rangel Silva; el secretario General del estado, profesor Eduardo Zuleta y directores de organismos públicos y privados.

Cabe citar que durante la homilía, monseñor Diego Padrón enfocó sus palabras en la apertura del Sínodo Diocesano en Trujillo y su importancia para la Iglesia para caminar en comunión con los feligreses y las autoridades, la cual no se decreta sino que se construye.


Monseñor Padrón luego de dar una larga explicación sobre el Sínodo se refirió a la Virgen de La Paz y dijo entre otras cosas que la Iglesia se ve prefijada y plenamente realizada en la Virgen María y para los trujillanos es la "Reina de La Paz", es un manantial de alegría para los más pequeños.

El gobernador Rangel Silva fue abordado en la Misa y dijo: "Me siento feliz de estar acá, celebrado junto al pueblo trujillano esa profunda fe cristiana, celebrando junto a la Virgen de La Paz, a quien encomendamos nuestros mejores deseos y peticiones para tener la sabiduría y hacer un buen gobierno y resolver los problemas al pueblo de la mejor manera. (Con información de Maríanela Mavárez / Diario El Tiempo y fotografías de Prensa Gobierno Bolivariano de Trujillo)


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