viernes, 22 de junio de 2012

CRÓNICA. Desagradables días de junio



Martes 19 de junio, 5 a.m, muchos trujillanos aún dormían placenteramente, mientras que otros ya levantados se disponían a comenzar su jornada diaria, siendo sorprendidos por un inusual y madrugador apagón, que fue fácil asociar a la serie de cortes eléctricos que casi a diario se suceden en sectores del estado Trujillo sin previo aviso.

Pero no...el apagón no fue de dos horas ni de tres como de costumbre, duró toda la mañana, se prolongó hasta la tarde y sin saber porqué los valeranos llegaron a sus casas de noche completamente a oscuras.

Esa misma noche se iniciaron los reclamos, todo un día sin luz era demasiado, pero la peor parte les tocó a los habitantes de la populosa parroquia San Luis, que desde el lunes carecían de servicio eléctrico, por lo que no se contuvieron y decidieron quemar cauchos y atravesar barricadas en las vías públicas para manifestar su descontento.

Pero lo peor estaba por venir, en toda Valera y otros nueve municipios trujillanos, durmieron sin electricidad y eso en estos días ardiente verano es como un castigo, pues ni aires acondicionados y ventiladores, los más valientes abrieron de par en par sus ventanas, corriendo el riesgo de ser visitados por algún ladronzuelo en las tinieblas, otros prácticamente pasaron la noche en vela, pero  al día siguiente la situación no era distinta.

La versión oficial


La situación se estaba tornando demasiado incómoda, otro día sin luz y sin saber la razón...en realidad ni la gente de Corpoelec lo sabía... el vocero de la empresa eléctrica socialista Iván Briceño, hizo su primer contacto con la prensa el día anterior y en plena rueda de prensa se fue la luz,  el gobernador medio tocaba el tema a través de Twitter porque también estaba desinformado.

No fue sino hasta el miércoles 20 de junio cuando localizaron el problema y con la ayuda de Corpoelec Lara, dos helicópteros (Pdvsa y Ejército) y funcionarios de la Empresa de Mantenimiento y Ornato de la Gobernación (Emao), se metieron en el sitio donde se cayeron dos antenas que generan 18 mil voltios de la sub estación Valera II. La causa, las lluvias del domingo pasado.

En las cercanías de San Juan de Isnotú, allí estaba el problema, en un sitio algo intrincado y con dificultades de acceso por la densa vegetación, para rematar otro transformador en el sector La Floresta de Valera había explotado, impidiendo el restablecimiento oportuno del servicio.


El caos colectivo


La tarde de ese miércoles y hasta entrada la noche, Valera fue un caos, la gente protestando colapsó la ciudad, quemaron la casilla policial de El Milagro y querían saquear en Las Acacias, la cosa estaba ardiendo, ya la noticia era vox populi en todo el país, por lo que las instrucciones del gobierno eran radicales... solucionan o solucionan...

En el interín de ese día hasta solicitaron la renuncia del vocero principal de Corpoelec en Trujillo, la misma gente del PSUV por cierto; además un sindicalista en campaña electoral de la empresa eléctrica socialista hizo denuncias graves sobre la inexistencia de planes de mantenimiento en la entidad y uno que otro seguidor oficialista vociferaba que  la crisis era por saboteo de la oposición.

A grandes rasgos, ese fue el acontecer de esos dos días sin luz en Valera y más de la mitad del estado Trujillo, pues la noche del miércoles, pasadas las 10, comenzó a establecerse el servicio, poco a poco se calmaban los ánimos y la gente pudo dormir tranquila.
Hay que mencionar también el cierre de agencias bancarias, de estaciones de servicio de combustible, comercios y las pérdidas por alimentos descompuestos.

En Trujillo Capital también

Ya el jueves 21 el Gobernador Hugo Cabezas informaba que el problema estaba resuelto en un 96%, pero la cosa no fue tan fácil, para poder tranquilizar a los que tenían dos días sin luz, hubo que sacrificar al municipio Trujillo y en la noche de ese jueves sus habitantes no se quedaron atrás y salieron a protestar en la calle porque les quitaron la electricidad.

Ya para el día que se publica esta crónica (viernes 22 de junio de 2012), todo parece estar en calma, uno que otro corte intempestivo en la periferia valerana (léase Carvajal, Motatán, Pampán) y la promesa de Corpoelec de solucionar lo de la sub estación Valera II en el trascurso de un mes, parecen ponerle punto final a este capítulo oscuro, dos días de junio que pusieron en jaque a Valera y todo el estado Trujillo. (Jogly Valero)